3 oct 2013

Evaluación intermedia


Aunque suene un poco aburrido, este no es el caso. La evaluación intermedia es una de las formaciones obligatorias dentro del programa Servicio Voluntariado Europeo, para todos los voluntarios, que sus proyectos duren más que 6 meses.

Descubriendo un pueblo cerca de Soncillo
Mi evaluación intermedia estaba programada para Julio, pero como teníamos muchos eventos en esta temporada dentro de mi proyecto me daba mucha pena perderlos y en Agencia Nacional me permitieron ir al siguiente, que se hacia en Septiembre. El 23 de Septiembre me fui hacia Burgos, donde nos encontramos con casi 70 voluntarios más, para ir a un pueblo muy pequeño, llamado Soncillo. Después de casi 12 horas de viaje al fin estábamos todos allí en un albergue juvenil, preparados para conocernos y compartir nuestras experiencias.

Con Emilia de Polonia, presentando Aragón
Es muy difícil decir que es exactamente una evaluación intermedia, porque para mi eran muchas cosas. Era una formación, tiempo y oportunidad para la reflexión sobre mi SVE, aprendizaje y experiencias que obtuve en los últimos 8 meses en Caspe. Pero también era una oportunidad para conocer mucha gente, de todo el mundo que actualmente están trabajando en proyectos muy variados por toda España. Me encanta conocer gente nueva, escuchar sobre sus proyectos y compartir mis conocimientos, entonces pase todo el tiempo libre posible charlando con la gente. Conocí muchos proyectos interesantes y también obtuve algunas ideas nuevas para mis futuros proyectos.

 Con voluntarios de Letonia y Bulgaria
Pero la sorpresa más grande eran los proyectos malos. De estar tan a gusto en Caspe, con mi proyecto, el pueblo y la gente aquí no me podía ni imaginar que hay algunos proyectos que no van bien. Me sorprendió mucho que algunos voluntarios ni si quieran tienen tutores, que sus coordinadores no saben cuales son sus deberes, que no tienen trabajo, que se aburren en sus pueblos o que sus proyectos no funcionan. Ya sabia antes, que mi proyecto seguro es uno de los mejores, pero ahora estoy aun más segura que es el mejor proyecto que podía encontrar. Y todo esto gracias a la gente con quien trabajo, a mi coordinadora Sara, que siempre se preocupa de que mi trabajo vaya bien; a mi tutora Carmen, que va de formaciones para ayudarme con mi Youthapass y que siempre tiene un montón de propuestas para mi tiempo libre; a Carmen que me lleva a pueblos y hace posible que conozca a los jóvenes y toda la comarca de Caspe y que también me visita para tomar una cerveza; a David, que lo conoci como compañero de piso, pero al final nos cogimos mucho cariño y nuestra relacion se ha convertido en mucho más; y al final también a toda la gente de Caspe, que siempre me incluyen en las actividades del pueblo y me dan oportunidades para conocerme a mi misma y para disfrutar tanto de la experiencia que tengo aquí.

Con mis compañeros de trabajo en la despedida de una de las compañeras

Con mis amigas Caspolinas en Fiestas de Agosto

2 oct 2013

Ahora queda poco ...

Campo de trabajo
Después de ocho meses en Caspe, poco a poco, está llegando el momento de mi despedida. Cuando vienes a hacer un voluntariado de largo tiempo te parece que tienes tanto tiempo y que puedes hacer tantas cosas. Pero el tiempo corre con su ritmo. En Eslovenia solemos decir que el reloj corre y no dice nada. Y así antes de darte cuenta viene el momento de hacer tus maletas y volver a casa.


Formación a la llegada en Alsasua
Por eso es muy importante disfrutar y aprovechar todo el tiempo y todas las posibilidades que las tenemos durante nuestro voluntariado. La cosa es que al final de la experiencia siempre es muy diferente de lo que imaginábamos antes de irnos de casa. De las historias de otros voluntarios y también de mi propia experiencia puedo decir que normalmente esta mejor de lo que esperamos, pero a veces también puede ser peor.


Con jóvenes en Caspe
Para mi esta experiencia definitivamente fue algo mucho mejor de lo que esperaba. Antes de irme sabía que voy a tener mucha experiencia nueva de trabajo, que voy a conocer mucha gente y muchos lugares nuevos, que voy a aprender mucho sobre una cultura poco conocida y que voy a formar nuevas amistades y relaciones. Pero nunca me imaginaba que esta sería una experiencia tan excepcional. Era todo lo de arriba e incluso mucho más. Nunca me imaginaba, que me voy a incluir en tantas actividades diferentes, que voy a conocer tanta gente y que me voy a sentir aquí en Caspe como en casa después de un tiempo tan corto.


Visitando monumentos
No solo que aprendí cosas que me pueden servir en mi búsqueda de un trabajo nuevo, pero también lo tengo mucho más claro en que me gustaría trabajar de verdad. Tengo mucha más autoestima y tengo más confianza en mi misma en hora de hacer cosas nuevas.

Aunque a veces tenía momentos de crisis, momentos de echar de menos todo conocido y estar harto de todo el tiempo acostumbrándome de algo nuevo. Pero en ningún momento, ni si quiera en los momentos más difíciles, arrepentí de salir de Eslovenia para hacer este voluntariado. Y ahora solo me queda un mes aquí y me estoy poniendo un poco triste, porque aunque disfrute de todos los momentos, me siento como que quedan muchas cosas para descubrir y conocer.  Y con todo el cariño que cogí por la ciudad y sus habitantes me siento como que parte de mi hogar ya está aquí.
En Evaluación intermedia

Solo veo un remedio en esta situación - disfrutar a tope lo que me queda aquí y luego volver simepre cuando tenga la oportunidad :)